La Fundación LED (Libertad de Expresión + Democracia) manifiesta su preocupación por la muerte de la periodista Griselda Blanco, en la localidad de Curuzú Cuatiá, provincia de Corrientes.
La periodista apareció sin vida en su domicilio el pasado sábado 20 de mayo, si bien la primera hipótesis de la muerta fue el suicidio, con el avance de la investigación las autoridades policiales decidieron tratar el caso como un femicidio. Las primeras sospechas indicaban un posible caso de violencia de género a manos de la pareja de Griselda Blanco, sin embargo familiares y colegas manifestaron que podría existir vinculación entre la muerte y la labor periodística que desarrollaba la víctima.
Blanco había denunciado en su portal de noticias abusos por parte de autoridades policiales y un caso de mala praxis que costó la vida a su amiga Débora Serrano. Según algunos de sus colegas la periodista había recibido amenazas en las últimas semanas. Dada la gravedad de este caso las autoridades judiciales deben actuar de manera contundente para esclarecerlo e imponer a los responsables las sanciones correspondientes.
Si se confirmara que el homicidio está vinculado a la labor periodística de la víctima estaríamos en presencia de una inadmisible limitación al ejercicio de la libertad de expresión y de prensa y el derecho al acceso a la información consagrados en nuestra Constitución Nacional y en los Tratados Internacionales que la integran.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos ha sostenido que “las agresiones cometidas en contra de los periodistas tienen el objetivo de silenciarlos, por lo que constituyen igualmente violaciones al derecho que tiene una sociedad a acceder libremente a la información. Una prensa independiente y crítica constituye un elemento fundamental para la vigencia de las demás libertades que integran el sistema democrático y el estado de derecho.” y que “el asesinato, secuestro, intimidación, amenaza a los comunicadores sociales, así como la destrucción material de los medios de comunicación tienen dos objetivos concretos. Por un lado, busca eliminar a aquellos periodistas que realizan investigaciones sobre atropellos, abusos, irregularidades o ilícitos de todo tipo, llevados a cabo ya sea por funcionarios públicos, organizaciones o particulares en general, a fin de que sus investigaciones no puedan concluirse, alcancen el debate público que ameritan o simplemente como represalia de éstas. Por otro lado, busca ser una herramienta de intimidación, mediante la cual se envía un claro mensaje para todas aquellas personas de la sociedad civil que realizan tareas de investigación sobre irregularidades en la gestión pública.”
LED se solidariza con los familiares y colegas de la periodista Griselda Blanco, dará seguimiento al caso y continuará trabajando para que periodistas y trabajadores de prensa puedan realizar su labor en un entorno libre de amenazas y violencia como corresponde a una sociedad democrática.