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Atentan contra un periodista en la ciudad de Resistencia provincia de Chaco

La Fundación LED (Libertad de Expresión + Democracia) manifiesta su profunda preocupación por el atentado incendiario contra el periodista Darío Zarco director del diario Primera Línea de la ciudad de Resistencia en la provincia de Chaco en la tarde del 12 de Diciembre de 2013.

Según el relato de los testigos, dos sujetos destruyeron la luneta del automóvil del periodista que se encontraba estacionado en la puerta de su casa y arrojaron un elemento encendido en el interior del mismo.

El hecho ocurre dos días después que el periodista denunciara un ataque sufrido por una comisión de policías a unas cuadras de su domicilio particular. En esa madrugada, el periodista cubría los violentos episodios que se desarrollaron en la ciudad de Resistencia cuando fue testigo de un procedimiento que los propios policías admitieron como irregular. En esa ocasión fue acosado, amenazado e insultado, además de sufrir la rotura del teléfono celular en el que había registrado las imágenes de los episodios.

La Fundación LED, advierte en este acontecimiento la misma causa que se denunciara en fecha 11 de diciembre en Santiago del Estero, cuando se realizó un allanamiento en el medio Última Hora y la posterior detención del periodista Juan Pablo Suárez luego que el mismo consiguiera una video grabación de la agresión sufrida por un policía de esa provincia y su familia cuando se manifestaban públicamente en reclamo por mejoras salariales.

Si bien son reiterados los hechos de violencia que durante este año se han producido en Argentina y que nuestra organización viene denunciando en distintas ocasiones, los sucesos que afectan al país en las últimas semanas expresan un peligroso estado de crecimiento de agresión hacia aquellos medios y periodistas que registran casos de violación de las garantías constitucionales.

La Fundación LED (Libertad de Expresión + Democracia) exige la inmediata protección de los periodistas agredidos, el esclarecimiento y cese de los actos de violencia, contra los trabajadores de prensa y el reconocimiento del Estado de la situación de tensión social y su posterior pacificación que favorezcan la convivencia democrática.