Agresiones a la prensa luego de la condena a la ex Presidente Cristina Fernández de Kirchner.

La Fundación LED (Libertad de Expresión + Democracia) manifiesta su profunda preocupación por el clima de hostilidad contra periodistas y medios de comunicación que se ha desatado a partir de la confirmación, en la Corte Suprema de Justicia de la Nación, de la condena a 6 años de prisión de la ex Presidenta Cristina Fernández de Kirchner.

En una declaración anterior nos referíamos a los hechos de vandalismo que se produjeron en instalaciones de la señal de noticia TN y de Canal Trece pocas horas después de conocido el fallo. En los días posteriores a que se conociera la decisión de la justicia han continuado los ataque y amenazas contra medios y periodistas. La sede de Radio Rivadavia también fue vandalizada con pintadas amenazantes contra el periodista Jonatan Viale, en la señal de streaming Neura aparecieron pintadas con amenazas al periodista Alejandro Fantino, algo similar sucedió en la señal Olga, contra los streamers Santiago Rodríguez Zahn y Franco “Mortedor”, por otra parte en las cercanías del domicilio del periodista Gustavo Noriega aparecieron pintadas con la leyenda “Noriega Mascota de Magneto”, grupos de militantes arrojaron, en restaurantes y supermercados, panfletos agraviantes hacia la periodista Guadalupe Vázquez y el periodista de TN, Alan Ferraro, fue amenazado mientras cubría las manifestaciones en los alrededores de la casa de la ex Presidenta.

Todos estos hechos son graves, debilitan el debate público y constituyen una clara limitación al ejercicio de la libertad de expresión y de prensa y del derecho al acceso a la información por parte de los ciudadanos consagrados en nuestra Constitución Nacional y en los Tratados Internacionales que la integran.

Por otra parte, no pueden pasar desapercibidas las amenazas a los Jueces de la Corte Suprema, Horacio Rosatti, frente a su casa en la Ciudad de Santa Fé y a Ricardo Lorenzetti en una publicación en la cual su casa en la localidad de Rafaela aparece en llamas, y el ataque al frente de la Fundación Libertad en Rosario con inscripciones que identifican a la Corte y a sus miembros como “mafia”. Si bien en estos casos no se trata de periodistas y medios la intención de intimidar y silenciar resulta evidente.  

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos ha sido clara al establecer que la “intimidación, amenaza a los comunicadores sociales, así como la destrucción material de los medios de comunicación tienen dos objetivos concretos. Por un lado, busca eliminar a aquellos periodistas que realizan investigaciones sobre atropellos, abusos, irregularidades o ilícitos de todo tipo, llevados a cabo ya sea por funcionarios públicos, organizaciones o particulares en general, a fin de que sus investigaciones no puedan concluirse, alcancen el debate público que ameritan o simplemente como represalia de éstas. Por otro lado, busca ser una herramienta de intimidación, mediante la cual se envía un claro mensaje para todas aquellas personas de la sociedad civil que realizan tareas de investigación sobre irregularidades en la gestión pública. Esta práctica busca que la prensa como mecanismo de control, guarde silencio o se haga cómplice de aquellas personas o instituciones que realizan actos o hechos abusivos o ilegales. En última instancia, lo que se busca es impedir a toda costa que la sociedad sea informada de estos acontecimientos.”

La Fundación LED se solidariza con los afectados, dará seguimiento a cada uno de los casos y continuará trabajando para que la labor de la prensa independiente sea respetada por todos los integrantes de nuestra sociedad como una condición elemental para el desarrollo de nuestro sistema democrático.