La Fundación LED (Libertad de Expresión + Democracia) manifiesta su repudio ante la detención y las amenazas al cronista Santiago Vera de La Gaceta de Tucumán por parte de la Policía de Santiago del Estero.
El reportero gráfico Santiago Vera se encontraba cubriendo los incidentes que se produjeron previo al partido entre Central Córdoba y Atlético de Tucumán en el estado Madre de Ciudades de Santiago del Estero. Como consecuencia de los desmanes la policía provincial comenzó a reprimir a los hinchas del club tucumano y en medio de esos disturbios detuvo, sin justificación aparente, al trabajador de prensa.
Desde la comisaría en la cual se encontraba detenido Vera denunció que «La Policía de Santiago del Estero me dijo que, por ser tucumano, me iba a hacer desaparecer; que no me haga el vivo». Durante los incidentes también resultó lesionado por el accionar de las fuerzas de seguridad el periodista Daniel Coronel. En ambos casos los equipos de los trabajadores de prensa resultaron dañados como consecuencia de la represión policial.
Este tipo de accionar por parte de una fuerza de seguridad resulta intolerable en una sociedad democrática y constituye una clara limitación el ejercicio de la libertad de expresión y de prensa y al derecho al acceso a la información de los ciudadanos consagrados en nuestra Constitución Nacional y en los Tratados Internacionales que la integran.
Recordamos que la Declaración de Principios sobre Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos establece que “el asesinato, secuestro, intimidación, amenaza a los comunicadores sociales, así como la destrucción material de los medios de comunicación, viola los derechos fundamentales de las personas y coarta severamente la libertad de expresión. Es deber de los Estados prevenir e investigar estos hechos, sancionar a sus autores y asegurar a las víctimas una reparación adecuada.”
Por otra parte en su documento “Violencia contra periodistas y trabajadores de medios” el organismo remarca que “Instruir adecuadamente a las fuerzas de seguridad del Estado sobre el rol de la prensa en una sociedad democrática constituye un paso importante para prevenir la violencia contra periodistas y trabajadores de medios de comunicación. Por este motivo, la Relatoría Especial ha recomendado que los Estados adopten mecanismos de prevención adecuados para evitar la violencia contra quienes trabajan en medios de comunicación, incluida la capacitación de funcionarios públicos, en especial las fuerzas policíacas y de seguridad y si fuere necesario, la adopción de guías de conducta o directrices sobre el respeto de la libertad de expresión.”
Hasta el momento no ha habido por parte de la Policía de Santiago del Estero o del Gobierno provincial explicaciones sobre lo sucedido.
No es la primera vez que se detiene a un periodista en esa provincia, en diciembre de 2013 Juan Pablo Suárez fue encarcelado luego de cubrir una marcha de periodistas provinciales. Permaneció detenido durante 10 días con presos comunes acusado del delito de sedición. Los funcionarios que lo acusaron debieron enfrentar causas ante la justicia federal. ( http://fundacionled.org/articulos-y-monitoreo/agresion-a-periodistas-y-medios/allanan-diario-en-santiago-del-estero )
La detención de un trabajador de prensa mientras se encuentra realizando su labor es siempre un hecho grave, pero las amenazas denunciadas constituyen un retroceso en la vigencia de los Derechos Humanos y nos retrotrae a prácticas dictatoriales que nuestro país dejó atrás hace 40 años.